Fue en el año 2015, cuando conocí
el despoblado o pueblo de Villarijo. Otro pueblo más abandonado en las Tierras
Altas de la provincia de Soria. Pueblo serrano con encanto, del que quede fascinado. De esa ruta de turismo rural o escapada a la sierra nace la presente entrada.
Se encuentra a unos 800 metros sobre el nivel del mar, es
uno de los de menor altitud de toda la provincia de Soria. Su altitud y la
ortografía del terreno, hacen que posea un micro-clima especial y único en la
sierra. Este clima determina que florezcan, en la vega del río Linares,
abundantes árboles frutales: cerezo garrafal, guindo, peral, manzano, nogal,
higuera, morera y otros. Aún podemos ver parras en la entrada de algunas casas.
En su término y en bancales para dominar el relieve, se cultivaba el olivo. En el catastro del Marques de la Ensenada, a mediados del XVIII, nos habla que una cifra cercana a los 2.000. Los pueblos de Peñazcurna y Vea, también en la vera del Linares, contaban con plantaciones pero eran menores.
Parece lógico pensar, que si había olivos podría existir un
trujal para extraer el aceite. Y existió. ¿Queréis verlo? Pero no seáis
ingenuos, veréis no un trujal sino las ruinas de él. No pasa nada, pues en la
provincia de Soria había muchos más molinos de aceite. Inocentes nuevamente,
era el único que existía en toda la provincia.
El tejado se hundió hacía el año 2007, desaprensivos con
fuego. Pero te preguntarás: ¿Algo se habrá hecho? Iluso, nada de nada. El
trujal ya perdido. Y si en todo este tiempo no se han preocupado por conservarlo
y rehabilitarlo, no lo van a hacer ahora.
Podríamos ver esa impresionante viga, creo que olmo o álamo,
prensa de trujal hoy completamente deteriorada. Las ruedas de piedras
redondas, las esteras de esparto, los depósitos para la recogida del aceite,
etc.
El molino de aceite fue adjudicado por la Excma. Junta
Superior de Ventas de Bienes Nacionales en 1862, a Tomas Sáenz. Algo de
historia ya tiene.
La repoblación forestal obligatoria de toda la zona fue fundamentalmente de
pinos, pero por suerte se conservaron los olivos. El dinero público va
para la poda y cuidado de los pinos. Los olivos abandonados.
Como curiosidad, en Soria ciudad hay una plaza que se llama
del Olivo. ¿De dónde es el olivo de dicha plaza? de Villarijo. Dieta mediterránea y aceite de oliva. Doctor Ruiz Liso querido y aquí poco reconocido. La provincia de Soria capital mundial de la Dieta Mediterránea en el ámbito escolar en el 2015. Placa bajo el olivo, con los Mandamientos
de la Dieta y Cultura Mediterránea. “Estos
10 mandamientos se resumen en dos: Amarás la dieta mediterránea como a ti
mismo. Al prójimo trasmitirás sus beneficios.
Cerca del trujal se encuentran unas de fuentes de aguas termales medicinales, una sulfurosa y otra ferruginosa. El agua la empleaban las sufridas mujeres para lavar la ropa, unos metros más abajo del nacedero.
Hubo un proyecto de explotación en el año de 1876 de D. Juan
José Gutiérrez Torre, vecino de Enciso y diputado provincial de Logroño, por el
partido de Arnedo. En el término de Villarijo y sitio que llaman el Manadero,
se propone el expresado señor Gutiérrez hacer calicatas o investigaciones de
aguas minero-medicinales a fin de reunir cantidad bastante para curación de
enfermos. El terreno que pretende utilizar es del común, ocupando una extensión
superficial de veinte hectáreas. Proyecto al que finalmente renunció, en el año
1884.
En la exposición Universal de Chicago del año 1893, fueron premiadas estas aguas <sulfurosas y ferruginosas> de Villarijo (Soria) tan conocidas desde muy antiguo por sus prodigiosas curaciones, habiendo colocado el Ayuntamiento aquellos riquísimos manantiales, en condiciones de todo punto inmejorables.
Palabras, palabras bonitas y titulares de prensa, largo tiempo escuchadas. Sinergia. Revitalizar. Dinamizar. Fondos contra la despoblación. Poner en valor el patrimonio histórico y cultural. Turismo generador de empleo y actividad económica.... Palabras.
¿No se pueden aprovechar estos olivos bajo alguna fórmula administrativa? ¿No pueden ser un complemento a los trabajos forestales? ¿No se puede discriminar positivamente para ayudar a fijar población? ¿No se puede favorecer el desarrollo sostenible? ¿No se puede recuperar el Trujal dando temporalmente trabajo a la zona? ¿No se puede poner en valor, junto con el resto de recursos naturales y patrimoniales? ..... Actuación.
Hola. Mi madre es de Villarijo y acabo de topar con este post buscando información sobre este municipio. Muchas gracias por tu colaboración, seguro que a mi madre le gusta saber que el olivo de la plaza de Soria es originario de su pueblo.
ResponderEliminarHola Cristina, precioso el pueblo de tu madre. Precioso el pueblo y el paisaje. Una pena las piedras caídas y los sueños olvidados. Una pena que por los poderes públicos no fructifiquen proyectos, que haberlos ahílos. Una pena que habiendo ayudas para edificios singulares, el único trujal en la provincia de Soria, se encuentre en ruina total. Una pena que no se conserve la memoria de su hijo predilecto don Ezequiel Solana. Una pena la torre del reloj, la iglesia,…. Una pena que olvidemos tan pronto. Un esfuerzo se merece, sé que hay quien lo está haciendo y los animo, aunque solo sea a la memoria de nuestros mayores. Por cierto el campo de tierra sagrada, donde muchos de ellos descansan, estaba limpio.
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